KUALA LUMPUR: Un lugar de encuentros (Malasia I)

Hemos estado en Kuala Lumpur 2 veces, una cuando llegamos al sudeste asiático y otra, 2 meses y medio después, cuando nos despedimos de Asia. En las 2 ocasiones nos tocó "kurrar" preparando los siguientes pasos del viaje y poco hemos visto más que las torres petronas (las dos veces, la segunda nos gustó más porque descubrimos que por el otro lado tenían un parque y más edificios), chinatown que fue donde nos hospedamos, el centro comercial de Tecnología donde compramos un miniportatil junto con Karen y Luk, una pareja de Holandeses majísimos con los que compartimos charlas sobre viajes, ellos están haciendo lo mismo que nosotros pero empezaron en sur américa, nos dieron muy buenos consejos y lo pasamos muy bien. La guest house de la primera vez tenía una zona común en la que coincidimos con gente muy maja y la que pasamos buenos ratos conversando con ellos. En la guest house de la segunda vez también conocimos a Íñigo, un español afincado en méjico con el que compartimos además de charlas, pelis (nos llenó el disco duro del ordenador, qué bueno!) y un muy agradable día de paseo por el jardín botánico de Kuala que es como el retiro y la casa de campo juntos pero mejor cuidados y más tranquilo. Cuando volvíamos nos encontramos una actuación estelar cerca de la guesthouse (pensión) y, sin saber cómo pasó, me encontré haciendo la supercoreografía con ellos en medio del corro de gente, no si... la verguenza era verde y se la comió un burro, jajajjja podéis ver un vídeo de mi maravillosa actuación, ya veréis ya!

Y una noche nos la pasamos de charla con una pareja de Vascos, Aitzi y su marido (qué rabia me da pero soy malísima para los nombres vascos y no recuerdo el suyo) Nos dieron una inyección de ánimo y buen rollo que nunca olvidaremos y esperamos volver a encontrarnos en algún lugar de DAYURI o del país Vasco que también es un buen planet. Finalmente Kuala ha sido más un lugar de encuentros, con personas geniales, de búsquedas de información y cositas que nos han venido bien para continuar nuestro viajes, de ubicación de lo pasado y de preparación de lo futuro y, entre medias, poquito pero poquito turismo.